Hace unos años las grasas tenían, en general, muy mala imagen ya que se consideraban responsables de muchos problemas de salud, desde la obesidad a los problemas de corazón. Tanto es así que las dietas bajas en grasas eran las más populares. Sin embargo, con el tiempo esta afirmación se ha visto muy matizada, ya que se ha demostrado que existen grasas saludables, como el aceite de oliva virgen extra que no solo no perjudican la salud cardiovascular, sino que contribuyen a mejorarla de manera considerable.
Por eso, desde Óleo Jarico queremos unirnos a la celebración del Día Mundial del Corazón que se celebra este 29 de septiembre, poniendo el acento en todas las cualidades que convierten a este alimento en un gran aliado para mejorar la salud cardiovascular, como explica la Fundación Española del Corazón, ayudando a bajar la tensión arterial, reduciendo el riesgo de arterioesclerosis, regulando los niveles de colesterol, reduciendo la inflamación y bajando el riesgo cardiovascular.
Además, el consumo de aove de manera regular, entre 30 y 60 ml diarios, contribuye también a disminuir el riesgo de otros factores relevantes para la salud del sistema circulatorio, como son la diabetes y la obesidad. Por todos estos motivos se convierte en un ingrediente esencial en la dieta diaria, que además es muy fácil de integrar, ya que encaja tanto en platos dulces como salados, es el más apropiado para cocinar los alimentos, ya que aguanta mejor el calor, y es el mejor aliño posible para las ensaladas y para las verduras.
Un conjunto de cualidades saludables
El aceite de oliva virgen extra destaca por su alto contenido en sustancias antioxidantes, especialmente los polifenoles, los carotenos y la vitamina E. Este dato es muy importante ya que es la oxidación de los compuestos de las grasas lo que añade riesgo de salud a su consumo. Los polifenoles impiden esa degradación y además extienden esa protección a las células del cuerpo humano. El contenido en estas sustancias es mayor en el virgen extra que en los aceites refinados, por eso es recomendable elegir su consumo frente a otras alternativas.
También es destacable el contenido de ácido oleico, que es el responsable de reducir los niveles de colesterol ‘malo’, el LDL, mientras que hace aumentar los del ‘bueno’, el HDL. Este balance es primordial para que los niveles de este compuesto, esencial para el correcto funcionamiento del cuerpo, sea el adecuado. Incluso otros estudios han demostrado que el consumo de virgen extra hace más efectivos los medicamentos para controlar el nivel de colesterol en sangre.
La dieta mediterránea puede presumir de ser una de las más saludables del mundo, también en lo que se refiere a la salud cardiovascular, y tiene precisamente en el uso de aceite de oliva uno de sus elementos principales. Por eso en Óleo Jarico animamos a seguir impulsando el consumo de aove, una tradición de nuestro entorno que además es un gran aliado para la salud de nuestro corazón.
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